Cómo descubrir en 5 pasos el Hambre Emocional vs Hambre Físico
¿Alguno de vosotros alguna vez se ha puesto a dieta?
¿Cuantos de vosotros ha conseguido sus objetivos a largo plazo?
Pues entonces definitivamente este es vuestro post…
El motivo por el cual las dietas no funcionan
En realidad el motivo principal del por qué las dietas no funcionan es la ansiedad.
La mayoría de las personas saben en mayor o menor medida aquellos alimentos que le convienen o no, el tema es que a pesar de esos conocimientos muchos de nosotros dependiendo el momento en que nos encontremos aun así seguimos comiendo y comiendo.
La ansiedad a menudo nos pasa malas jugadas.
¿Qué es la ansiedad?
A través de un ejemplo muy sencillo os explicare que es y cómo funciona la ansiedad.
Para entender la ansiedad por la comida os explicare el paralelismo entre un árbol y la ansiedad. El árbol está formado por sus raíces, tronco y las diferentes ramitas del mismo.
Por las raíces el árbol se va nutriendo, al igual que la ansiedad se nutre por diversas causas que nos van aconteciendo a lo largo del día y de nuestra vida. Contra más causas o nutrientes tengamos la ansiedad aumenta y va creciendo el tronco y las ramas.
Aprende más para descubrir Cómo prevenir la ansiedad.
Esas ramas son los efectos o consecuencias de nuestra ansiedad. Dependiendo de nuestras vivencias y entorno para cada uno será diferente, pero en el 70 por ciento de la población, la ansiedad por la comida es una consecuencia muy habitual.
El error que tenemos es querer solucionar esa ansiedad por la comida poniéndonos a régimen, o siendo muy restrictivos. Este control nos lleva al descontrol.
Si no me gusta alguna rama de mi árbol la solución no es cortarla, sino ver de que nutrientes me estoy alimentado para cortar de raíz ese árbol que no me gusta, y así, nutrirme de otro tipo de nutrientes para que surja otro tipo de árbol.
Recuerda que no estamos destinados sino programados. Por lo tanto podemos reprogramarnos si nosotros queremos y aprendemos nuevas formas de hacerlas cosas.
¿Cómo diferenciar entre hambre física y hambre emocional?
CONSEJO #1
Una forma de entender cuando tenemos hambre física o emocional es preguntarnos: ¿Me comería una manzana?
- Si tu respuesta es SÍ, es que tienes hambre física, te da igual qué comer.
- Pero por si lo contrario tu respuesta es NO, que solo te apetece comida súper grasosa, azucarada o fast food es que tenemos hambre o vacío emocional.
Por ejemplo, ahora mismo te ofrezco un par de galletas de arroz, pero en seguida me dices “uiss no mira yo ahora lo que quiero es una tableta de chocolate”. Entones ¿realmente crees que tu intestino sabe distinguir entre galleta de arroz y chocolate?
¿Por qué crees que es tan común comer chocolate y todos aquellos alimentos fritos?
Porque está comprobado que activa el mismo centro en el cerebro que las drogas. Por eso nos gusta tanto y tenemos tantos antojos.
¿Porque crees que la gente toma drogas?
¿Para evadirnos no? Si estuviéramos bien no consumiríamos drogas ¿Cuánta gente aquí ha comido algo para evadir un problema?
CONSEJO #2
Otra señal que el hambre es real es que te viene poco a poco es decir te da tiempo a prepararte algo.
En cambio el emocional te viene de golpe. Lo quieres ahora mismo y no puedes para de pensar en comer.
Hay gente que ha hecho ayunos y no se ha muerto. Así que si tienes hambre física puedes realmente esperar a por lo menos coger unas almendras de aperitivo mientras cocinas tu plato preferido.
CONSEJO #3
El hambre real cuando acabamos nos sentimos bien, en cambio, cuando comemos con hambre emocional seguimos comiendo aun estando llenos.
Cuando empezamos a comer el cerebro no se da cuenta que empezó a comer, sino que tarda 20 minutos.
¿Cómo se da cuenta?
Porque hay un transmisor que va del estómago al cerebro que avisa a este último que empezamos a ingerir algo. Este transmisor se llama grelina.
Imagínate si no eres consciente de lo que comes hasta después de 20 minutos de haber comenzado a comer.
¿Qué cantidad de alimentos te puedes comer compulsivamente en esos 20 minutos?
Te has podido comer una vaca y tu cerebro no se habrá ni enterado. Por eso la importancia de comer con conciencia, con tranquilidad.
A poder ser con platos pequeños, si tenemos que servirnos otra vez no pasa nada. Así nos levantamos de la mesa y dilatamos el acto de la comida.
Otra opción es comer con palillos o cogiendo el tenedor con tu mano no predominante…
CONSEJO #4
Con el hambre real, después de comer te sientes bien. Puedes seguir haciendo tus actividades.
En cambio, con el hambre emocional al final sientes culpa.
Hay diferentes tipos de culpa:
-A veces es en mitad de la comida.
-Pero otras veces no te das ni cuenta de que sientes culpa hasta que no terminas. Esto es porque lo haces de una forma inconsciente y es imposible sentir culpa.
En definitiva, es importantísimo comer conscientemente.
Darte cuenta antes de sentarte a comer si estás estresada, con el móvil, el ordenador o en medio de una discusión …. Si es así mejor no te sientes a comer y dilata la comida para más tarde porque de lo contrario habrás comido un sinfín de comida basura y además no te habrás dado ni cuenta.
¿Qué sentido tiene comerte un pastel y encima no ser consciente, por lo menos si me como algo voy a ser consciente y lo voy a disfrutar no?
CONSEJO #5
Y por último esta hambre emocional te dice normalmente:
– Si como esto, se me pasará la angustia.
– Como tengo estrés, voy a comer.
– Me aburro, así que me voy a distraer comprándome una pizza para cenar.
– Es lunes, me lo merezco.
– Viernes, me lo merezco.
– Jueves, me lo merezco, es el día de la mujer.
– Me merezco este pastel porque trabajé mucho…
¿No crees que te mereces mucho más que eso? ¿Te gusta sentirte mal con tu cuerpo?
Pues entonces no te mereces eso, quizá te mereces ir a pasear o al cine …
El tema es que este tipo de comida libera serotonina, pero dura 3 minutos esa sensación de bienestar. En cambio la culpa dura 23 horas y 54 minutos
Cuando estamos deshidratados nuestro cuerpo pide agua, pero muchas veces en vez de beber comemos. Es decir confundimos la sed con el hambre.
Entonces mi primer consejo seria beber antes de todo, esperar unos minutos y ver que era, si era sed o hambre o las dos cosas. Otra forma de saber si estamos deshidratados es si tu orina es amarilla.
Conclusión
Resumiendo.
Si tienes hambre…
¿Te comerías una manzana?
¿El hambre ha empezado lentamente o de repente?
De acuerdo, solo le haré caso si ha aparecido lento, si es rápido es gula.
¿Me he quedado bien?
Esto quiere decir que era hambre física ¡Bien por mí!
¿Puedo seguir haciendo mis actividades sin culpa?
¡Estupendo! Hoy estoy que me salgo.
Lo que realmente me merezco es cuidarme y alimentarme bien.
¡Trátete con el máximo de amor posible!
¿Te obsesiona la comida? Asegúrate de no padecer anorexia, bulimia o obesidad.
Descubre más sobre los trastornos alimentarios.
Coach Nutricional, Cocinera Alimentación Natural y Ex-Deportista de Élite.
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